domingo, 17 de marzo de 2013

La Despedida... (omitiré la cursilada...)

Y que no ahora porque llevo tiempo sin escribirte, significa que llevo tiempo sin quererte...
Y no ahora que queda la casa vacía, queda todo lleno...
Y no ahora es cuando puedo controlar la angustia que me invade, que viene de dentro, si en cada sentimiento, apareces tú poniendo tu acento...
Y ahora yo solo...yo solo en casa... en nuestra casa sabes? Porque eramos nosotros...nosotros todo el rato...
Yo entrando en casa y sintiendo esa ola de calor, una ola de tu calor...
Yo mirandome la cara entre el vaho del espejo del baño...y odiando al vaho por estar largandose...en vez de estar poniendose, entre agua muy muy caliente y botes de jabón que nadie quiere coger...
Y yo ahora pasando por cada cuarto que desordenamos, poniendo orden en ese desorden que da el amor, en ese desorden de vivir al segundo...en el de...lo diré...en el de sentirse Feliz, lo juro.
Odio poner ese orden ...es la señal del final... es el principio de la nueva espera....pero eh...es una "espera" como he dicho.
Y yo ahora sentado en mi silla, sin antes haber tenido que apartar tu ropa interior...
Y yo buscando por los lados de la cama mas trozitos de esos envoltorios que me susurran que "te quiero" cada vez que los rompo a toda prisa...
Y yo recordando como estabas tumbada encima de la cama, como flotando y yo observandote...observandote como un loco.... y preguntandome que porqué me podias parecer tan sumamente bonita...pero no solo a los ojos...
Yo entrando en casa y oliendo tu olor...eso si ha sido un golpe bajo...
Y yo guardandome las mis mejores mierdas de ropas en el armario, porque siempre me pongo la mejor...como si no existiera un momento mejor para lucirla, como si no hubiera una ocasión mejor para arrugarla contra el suelo y mancharla, en el fondo me encanta mancharla.
Y yo mirandome en el espejo sin verme....incapaz de pensar algo e incapaz de no pensar nada.
Y yo recordando que la promesa de verte, se que pronto, pero...si llegamos al límite, que sea un solo la promesa de verte...otra vez, por dios. No soy de esos a los que les da miedo pasar días y días sin gloria, por llenarme tan solo unos segundos.
Y yo apartando tu papel del teclado....yo desgastando tu papel con la vista...yo observando como escribes.
Yo congugando en singular....
Yo recordando como estaba a punto de confesarte la que fue mi decisión sobre nuestro amor y este modo tan alocado de querernos......y interrumpido en la más sórdida taberna. Yo sintiendo que sin palabras....ya te lo he confesado...
Yo lleno de emoción durante estos largos segundos que se clavan debajo de las uñas... Yo con este sentimiento tan escualido, que me tiene pálido, que me roba el ánimo, y que me mantiene preso en un límido letargo.

Yo pensando...que este sentiemiento es solo alegría, solo alegría agridulce de este amor que yo ya  irremediablemente te tengo, que no es sencillo, ni siquiera imaginado, que surgió misteriosamente de la nada, que mágicamente no se ha detenido ante nada y que irracionalmente, instintivamente, sea lo más fuerte de todo.

Hoy y solo hoy, Melancolía en mayúsculas se escribe con V.

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